lunes, 27 de enero de 2020

Trekking EBC: Día 11, Dzongla - Cho La Pass - Gokyo


Toda travesía tiene su día clave, la jornada más dura y complicada, y mi trekking del Campo Base del Everest no iba a ser menos, pero no sería el día de llegar al mismo, esa sería la jornada que, a través del Cho La Pass, nos hace cruzar del valle del Khumbu al valle de Gokyo, cruzando también el espectacular glaciar de Ngozumpa.

La jornada amanece muy fría, por lo que me abrigo bien y me acerco a la sala común, donde coincido con un italiano que habla muy bien castellano, conversamos un rato y decidimos que le acompañaré a él y a su guía durante el día, ya que prefiero no pasar el Cho La Pass, y sobretodo el glaciar, yo solo.

Así que tras desayunar y pagar, Valerio y yo nos disponemos a salir del lodge, y cual es nuestra sorpresa cuando nos encontramos con que la noche nos ha regalado una copiosa nevada que ha dejado unos 3-4 dedos de nieve, por lo que en el collado seguro que hay bastante más.

El nevado día nos regala una espectacular visión del Arakam Tse

Tampoco podía faltar la foto de rigor del Ama Dablam

Ya en harina, nunca mejor dicho, empezamos a seguir la traza que sale justo detrás del lodge y que nos lleva en dirección a un precioso circo rodeado de 6.000's.

El camino queda bien marcado por las pisadas en la blanca nieve

Ahora toca remontar por este bonito circo

Enseguida alcanzamos una especie de balcón que transita por una zona de humedales en la que hay que ir con cuidado de no meter el pie en algún cauce ya que la nieve los tapa, más aun cuando uno se queda embobado mirando la belleza de este rincón del Himalaya.

Esta zona de humedales nos permite entrar en calor

Además poco a poco el sol empieza a bañar las montañas

Una mirada hacia atrás nos permite disfrutar del Ama Dablam y el Arakam Tse

El camino poco a poco se va empinando y toca avanzar por una zona de rocas en la que es complicado seguir el camino, por suerte las pisadas de los que nos preceden hace que sea más sencillo seguir el camino correcto.

De nuevo el camino empieza a empinarse

Primero tenemos que ir en dirección a este collado

Siempre con cuidado de no pegar un resbalón

Vamos ganando altura sin prisa pero sin pausa, que estamos ya rondando los 5.000 metros y se nota, por lo que merece la pena detenerse de vez en cuando y contemplar el valle que vamos dejando atrás, una visión impresionante que la nevada ha hecho que coja unos tintes mágicos.

Que gozada poder hacer una etapa invernal en el Himalaya

Imposible no pararse y mirar el valle que dejamos atrás

Poco a poco vamos llegando al paso clave de la subida

De nuevo en marcha hay que ir en busca de un corte muy visible en una gran losa de roca, que gracias a la nieve es mucho más fácil de identificar, además ya vemos a gente en ella, por lo que llegar a ella no presenta ninguna dificultad.

Por esa diagonal que se ve en el centro deberemos subir

Con un poco de zoom podemos ver a gente en plena faena

Tras alcanzar la altura de la diagonal, vemos que no es tan fiera como parecía desde abajo

Aquí llegamos a una de las zonas más divertidas y delicadas de todo el trekking, ya que nos tocará ascender por una ancha canal bien cubierta de nieve en la que disfruto como un enano buscando los mejores pasos entre la nieve y la roca mientras vamos avanzando a varios grupos.

Antes de empezar a subir, una parada para disfrutar de las vistas

No podía faltar un zoom a la cima del Arakam Tse

Empezamos a caminar por la divertida canal

Por la que ganamos altura muy rápidamente

Empezamos a transitar por un pequeño caos de bloques

En los que adelantamos a algún grupo

Justo al salir de la canal hay que ir con cuidado y realizar un giro a la izquierda buscando unos hitos que nos han de llevar a la base de la pared por la que transitaremos ahora.

Ya falta poco para salir de la canal

Impresiona la altura que hemos ganado en tan poco tiempo

Y las vistas no defraudan

Pero toca seguir avanzando

Ahora ya por terreno más cómodo

Pero no por ello hay que relajarse

Ahora toca seguir la traza que nos va llevando entre nieve y rocas hacia el pequeño glaciar que descansa a los pies del Cho La Pass.

Por el glaciar ya vemos una traza muy bien definida

El glaciar es pequeño, pero impresionan sus enormes paredones de hielo

Poco a poco nos vamos acercando

Pero aun tendremos que transitar por este caos de rocas y nieve

Ya en él nos toca volver a avanzar por una empinada ladera, en esta ocasión sobre un manto de unos 15 centímetros de nieve nueva, cosa que hace mucho más sencillo el caminar por encima del hielo del glaciar sin tener que ponernos los crampones.

Que gozada poder caminar por encima de nieve recién caída

Que nos regala estampas tan bonitas como esta

Empezamos la rampa final

Ya con el Cho La Pass bien visible

Después de una fuerte rampa por fin divisamos el Cho La Pass, pero para llegar hasta él antes nos tocará realizar una sencilla trepada ayudados por un cable de acero a forma de pasamanos.

Ya podemos divisar el Cho La Pass y todo el gentío que hay en él

Pero antes de subir hay que trepar un poco

Hay un pasamanos, pero si tienes experiencia en montaña no es necesario usarlo

Aquí tenemos a Valerio afrontando el último tramo

Por fin alcanzamos otro de los puntos clave de la aventura, el Cho La Pass, a 5.420 metros de altura.

Las vistas desde el Cho La Pass son impresionantes

En el collado, además de bastante gente, también nos encontramos con unas vistas espectaculares, por lo que es el lugar perfecto para pararnos a descansar un rato, más aun cuando no sopla ni pizca de viento.

Desde aquí vemos el collado al que deberemos llegar en unas horas

La gente aprovecha que no hace viento para conversar y disfrutar de las vistas

Antes de empezar el descenso decido ponerme los crampones de senderismo que me compré para la ocasión, ya que si bien se podría bajar sin ellos ayudándome de un cable de acero, preferí ir a lo seguro y poder caminar con mayor seguridad.

El descenso por esta vertiente es mucho más directo y vertical, y tras ver los resbalones de todos aquellos que no llevaban crampones, la gran mayoría, me alegré de haber llevado los 450 g extra de peso en la mochila.

La bajada será mucho más delicada que la subida

El calbe permite a los que no llevan crampones descender con algo más de seguridad

Bajar por aquí fue una auténtica delicia

Una mirada atrás para ver el camino recorrido

Ya en la parte baja del collado merece la pena darse la vuelta para ver por donde hemos bajado, además de darnos un respiro, que las bajadas también cansan.

Se van cruzando los que suben y bajan

A nosotros aun nos queda un trozo de seguir bajando

Ahora vamos avanzando por un caos de rocas y nieve, pero es mucho más fácil avanzar de lo que pueda parecer, ya que hay estacas y marcas rojas que nos indican en todo momento el camino a seguir.

Gracias a las estacas rojas es muy sencillo transitar por este caos de bloques

Poco a poco la nieve va desapareciendo

Después de un buen rato avanzando por fin llegamos a un punto donde la nieve desaparece y aprovechando que hay un banco y unas papeleras, decido quitarme los crampones y picar alguna cosa, que ya llevamos un buen rato de ruta.

Tras quitarme los crampones toca volver a ponerse en marcha

Pero antes una mirada hacia el Cho La Pass

Del que no puede faltar un zoom

Tras descansar toca volver a ponerse en marcha, y de nuevo el camino tira para arriba, en dirección a un collado, en el que aprovecho para descansar unos minutos mientras diviso ya el glaciar de Ngozumpa.

Este valle es precioso

Ahora toca ir hacia el collado que tiene la gran mancha de tierra blanca

Las vistas hacia el glaciar de Ngozumpa son impresionantes

No se quedan atrás las del Cho La Pass y el camino recorrido hasta ahora

Un último vistazo al paso de montaña más alto que he realizado

Desde aquí el camino ahora tira siempre hacia abajo por un sendero bastante bien marcado y sencillo de transitar en el que tan solo hay que ir con cuidado de no resbalar.

La bajada nos lleva por esta vaguada

En dirección a Dragnag

Después de un buen rato bajando por fin llegamos al pueblo de Dragnag, donde decidimos realizar una parada para comer, que llevamos muchas horas de ruta y hay que coger energías para cruzar el glaciar, que la cosa será dura y hay que estar con fuerza.

Se nota que en Dragnag no pasan tantos turistas

Ya con el estómago bien lleno nos volvemos a poner en ruta y empezamos a remontar la morrena del glaciar, siguiendo los hitos que nos van marcando el camino a seguir para llegar hasta el más grande de los glaciares del Himalaya, el Glaciar de Ngozumpa.

Tras comer, toca ponerse en marcha en dirección al glaciar de Ngozumpa

Una vez en el borde de la morrena vamos siguiendo el sendero que nos ayuda a bajar hasta el glaciar, por unas empinadas y resbaladizas pendientes.

La primera visión del glaciar impresiona, ¿por ahí tendremos que cruzar?

Vamos bajando en dirección al "cauce" del glaciar

Impresionan mucho esos paredones de hielo

Ahora se ve el porqué de ir mejor acompañado, ya que todo y que casi todos los desvíos llevan al mismo sitio, si vas con alguien, más si se trata de un guía, te da más sensación de seguridad, aunque tras haberlo cruzado, sin el mismo también se podría haber cruzado, pero seguramente tardando mucho más.

Seguimos en busca del glaciar

Las rocas y el hielo se fusionan

Uno ya no sabe cuando camina sobre hielo y cuando sobre tierra firme

Seguimos avanzando por mitad del glaciar

Transitar por el glaciar es impresionante, ya que vas escuchando de tanto en tanto el crujir del hielo y el caer de las rocas, cosa que demuestra que el glaciar está vivo y en continuo movimiento.

En algunos rincones afloran pequeños lagos

En otros, el sendero aparece muy bien definido

Es toda una experiencia transitar por aquí

No puedo parar de impresionarme con semejantes cortados de hielo

Que aun impresionan más según el ángulo por donde se mire

Ya en el otro lado toca remontar la morrena y la pared que nos han de dejar en un collado, siguiendo un sendero bastante descompuesto y delicado en el que hay que ir con bastante cuidado.

Por fin llegamos al otro lado del glaciar

Subir por aquí es casi más delicado que hacerlo por el glaciar

Desde el collado las vistas del glaciar son impresionantes, pero no podemos estarnos mucho rato, ya que toca continuar nuestro camino hacia Gokyo.

Semejante belleza se merece una bonita panorámica

Tras las fotos, toca seguir avanzando

Seguimos avanzando y nos topamos con una estampa de película, el grandioso tercer lago de Gokyo o Gokyo Tso, con el Gokyo Ri justo encima y el precioso pueblo que da nombre a la montaña y el lago justo en su orilla, una de las imágenes más bonitas del trekking hasta el momento.

Con esta foto entenderéis el porqué me quedé aquí varios días

Desde aquí ya solo queda descender hasta Gokyo y buscar un lodge, además aquí me despido de Valerio y su guía, ya que ellos irán a un lodge distinto del mío, ya que al que iban ellos había mucha gente y quería algo de tranquilidad para los varios días que estaría allí.

Ya en Gokyo, toca despedirse de Valerio

Al final me decanté por el Cho Oyu View Lodge and Restaurant, que está situado en la misma orilla del lago y que tiene unas espectaculares vistas al Cho Oyu, además en él coincidí con varios catalanes con los que estuve hablando toda la tarde y que estaban realizando el trekking a la inversa que yo.

Una vez finalizada la jornada ya puedo decir que este ha sido el día más duro, pero también el más divertido y montañero de todos, en el que he podido trepar, ponerme los crampones, cruzar un glaciar y realizar un paso de alta montaña, y todo siempre por encima de los 4.700 metros.

A continuación os hago un pequeño resumen de los números de la ruta:
  • Tipo de ruta: Lineal
  • Dificultad técnica: Media
  • Dificultad física: Difícil
  • Distancia: 13,75 Km
  • Altitud al inicio: 4.830 m
  • Altitud al final: 4.750 m
  • Ganancia de altura: -80 m
  • Punto más alto: 5.420 m
  • Punto más bajo: 4.685 m
  • Desnivel positivo: 1.055 m
  • Desnivel negativo: 1.155 m
  • Desnivel acumulado: 2.210 m
  • Cimas ascendidas: 0
  • Tiempo empleado: 8 horas 13 minutos
  • Tiempo en movimiento: 5 horas 43 minutos
  • Velocidad media: 1,67 Km/h
  • Ritmo: 35:55 min/Km

Os adjunto el track de Wikiloc de la ruta: Día 11: Dzongla - Cho La Pass - Gokyo

Saludos!!!

8 comentarios:

  1. Hola David.

    Sin palabras me has dejado!! Vaya rutón y vaya brutalidad de paisajes. Uno ya no sabe si elegir esos subidas, esas pedreras, los picos que te rodean, los pasos collados esos, ese salvaje glaciar o el lago.

    Lo que si hiciste bien (o te salió bien) es ir con Valerio y su guía. Que lo podrías haber hecho solo seguramente pero habrías ido mucho más lento, en algunos puntos más inseguro, fijándote si a lo lejos ves a la gente por donde va o por donde pasa, y si hubieras tendido algún percance habría sido mucho peor.

    Salud y guías gratis!!

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    1. Hola Toni,

      Para mi fue el día más completo de toda la ruta, pasando por todo tipo de terrenos y disfrutando de todo tipo de vistas, fue una jornada muy dura pero valió mucho la pena, de los mejores días de toda la ruta.

      Con Valerio y su guía me lo pasé muy bien, se me hizo una jornada diferente, en la que poder hablar con otras personas y comentar los pasos, disfrutar de las vistas, y conocer un poco mejor las montañas que me rodeaban.

      Valerio y su guía no me pusieron ingún problema con ir con ello, esos es algo que les tengo que agradecer, además le pregunté a Valerio cuanto le pagaba al guía por día, y justo cuando acabamos de comer le di lo mismo que le pagaba él, el trabajo hay que pagarlo, que ellos viven de guiar a los turistas, y aunque él no me lo pidió creí que era lo que había que hacer.

      Salud y collados nevados!!!

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  2. Hola David.

    Mira que todas las etapas que nos habías mostrado hasta ahora tenían un nivel altísimo, pero es que esta las supera a todas con creces!!!. Espectacular etapa!!. Así a bote pronto, y después de haber alcanzado el Campo Base, lo lógico sería pensar que la espectacularidad del trekking ya habría alcanzado su cenit, pero nada más lejos de la realidad. Si hasta ahora había sido un trekking rodeado de alta montaña, en esta etapa es que te viste inmerso en ella, además con el toque añadido de esa nevada nocturna, que le dio un toque de picante a ese impresionante Cho La Pass, en el que seguro que disfrutaste un montón.
    Y luego ese glaciar, se le ve bello, pero correoso de patear, pero menuda recompensa el cruzarlo, llegar a ese pueblito a orillas de ese inmenso lago. Lo dicho, una pasada de recorrido, para mi la mejor etapa de las que nos has mostrado.

    Iba a preguntarte si le pagaste algo al guía de Valerio, pero me queda claro con la respuesta al comentario de Toni jejeje. Muy buen gesto por tu parte, enhorabuena!!

    Un abrazo.

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    1. Hola Dani,

      Había leído y visto muchas crónicas y vídeos de esta etapa, pero hasta que no te ves inmerso en ella no te das cuenta de la belleza del entorno en el que se desarrolla, una autèntica etapa de alta montaña en el corazón del Himalaya y a más de 5.000 metros de altura, sin lugar a dudas, la etapa reina desde mi punto de vista, de toda la travesía.

      Como dices, uno se piensa que tras el campo base la cosa bajaría de belleza, pero parece como si este fuera la antesala a lo que vendrá, ya que la etapa siguiente a esta no se queda corta, pero eso ya lo veréis en la entrada del lunes, no voy a adelantar acontecimientos... jejeje

      El tema de pagar al guía es algo que me pareció lo más justo, por mucho que ya le pagara Valerio me habría parecido tener mucha jeta no pagarle yo también, que ellos viven de lo que los turistas dejamos allí, además el guía era un chaval joven que justo comenzaba y seguro que no tendría muchos clientes, por lo que cualquier extra es de agradecer.

      Un abrazo.

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  3. Hola David,
    Tot i que tens nivell de sobres per fer la ruta tu sol, vas fer molt bé d'anar amb un guía i el noi italià. Així ho vas poder fer acompanyat; tot i que em consta que en alguns pasos erets tu el que feia de guia en el propi guia i al Valerio :).
    Quina estampa de neu tan bonica vas trobar el dia de la ruta. Qualsevol diria que estaveu a Octubre!
    A mi el glaciar també m'ha impressionat amb les seves enormes pareds de gel.
    En general, les vistes d'aquesta ruta han sigut espectaculars. I m'alegro que aquest fos per a tu el millor dia de trekking!
    Petons,
    Txell

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    1. Hola Txell,

      Per molta experiéncia que es tingui en muntanya mai s'ha de menysprear aquesta, ja que mai saps el que pot pasar, així que si es pot anar acompanyat en moments delicats sempre es més sensat.

      El poder pasar el Cho La Pass amb neu li va donar un punt molt més divertit i estètic, la veritat es que vaig tenir molta sort.

      Caminar per la glaçera es impctant a la vegada que dur, es una experiència única.

      De totes totes va ser el dia més espectacular de tota la ruta ja que va tenir de tot, neu, glaçera, pas d'alta muntanya, trepada, grampons i vistes espectaculars, tot un 10 de ruta.

      Molts petons!!!

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  4. Hola David.

    Bueno, esto ya es otro nivel!, si bien el Campo Base es el objetivo y tiene una fuerte simbología, para mi está jornada (a falta de ver el resto), es la etapa del treking, no solo por su belleza, que tan bien has captado en las fotografías, sino también por la diversidad de los terrenos que atraviesa.

    Además, en está ocasión el tiempo os acompaño durante la travesía, con un sol de lujo y el cielo azulado, pero es que con la nevada de la noche, encima de facilitaros en avance, dejo un paisaje aún más de alta montaña.

    La idea del guía, sin duda fue todo un acierto, ya te comente en la previa antes de hacer el treking, que aunque fueras solo, en algún momento echarás mano de alguien, porque estos terrenos son duros y es fácil perderse o tener un incidente, y allí, cuantos menos problemas mejor.

    Salud y montaña!

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    1. Hola Eduardo,

      Esta es sin duda la etapa reina del trekking ya que lo tiene todo, dureza, paisajes, pasos más técnicos, nieve, glaciar, lago y un terreno en el que hay menos gente tras varios días cruzarme con más gente.

      El tiempo encima acompañó, con unos cielos de un azul precioso que contrastaba con el blanco de la nieve y el negro de la roca, una aunténtica pasada.

      El tema del guía para esta jornada ya lo contemplaba, por lo que fue una suerte conocer a Valerio, ya que aunque se podía realizar solo, siempre es mejor ir acompañado en terrenos tan perdedores como lo puede ser un glaciar, mejor ser prudente.

      Salud y montaña.

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